Bosquejos para Predicar
El amor de la comodidad y del placer, el temor del hombre y de las mujeres, la soberbia del corazón y el deseo de alabanza. ¡Despierta! ¡Y suéltate! Da el paso a la libertad de los hijos de Dios. Bosquejo para predicar.
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Bosquejos para Predicar
La diferencia entre el fuego falso y el verdadero es real. El falso es hecho por uno mismo. «Vosotros que encendéis fuego.» El verdadero es de lo alto.
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Bosquejos para Predicar
¿Hasta cuándo no querrás humillarte delante de Mí? (Éx.10:3). EL Faraón, al igual que muchos en nuestros tiempos, se resistió constantemente al llamamiento de Dios.
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Bosquejos para Predicar
Plaga tras plaga había sido anunciada, y plaga tras plaga había venido, pero la plaga del pecado en el corazón humano sigue endureciéndolo en resistencia en contra de las advertencias claras de los juicios de Dios.
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Bosquejos para Predicar
Giezi… había puesto el báculo sobre el rostro del niño; pero no tenía voz ni sentido. El báculo era el del profeta Eliseo, y era indudablemente un buen báculo, bien idóneo para cumplir la misión de un báculo, pero impotente para dar vida a un muerto.
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Bosquejos para Predicar
En la solitaria isla de Patmos vivía un ermitaño. Cuando le preguntaron por qué vivía en tal soledad, contestó: –Algún día tendré que encontrarme con Dios. Me estoy preparando para aquel día.
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Bosquejos para Predicar
Nuestro Dios es un Dios que ama dar. Alejandro Magno le dijo a uno abrumado por su generosidad: «Yo doy como un rey». Jehová da como el Dios infinito.
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Bosquejos para Predicar
Es posible que uno carezca de sabiduría. Esto se sugiere en las palabras: «Si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría.» ¡Qué triste carencia! ¡Y a qué enredos nos puede llevar esta carencia!
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Bosquejos para Predicar
El Sello es el Espíritu Santo, que fue prometido, y ahora ha sido dado. Su presencia en nuestros corazones es la evidencia de nuestra aceptación por parte de Dios
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