¿Podría ser una persona que tiene una gran cantidad de dinero? ¿Podría ser una persona que es feliz la mayor parte del tiempo? ¿Podría ser una persona que tiene cosas que representan “la buena vida”? Cuando se hace esa pregunta, la mayoría de las personas responden que la riqueza es estabilidad financiera.
En otras palabras, cuando una persona es rica tiene estabilidad financiera. ¿Qué dice la Biblia? Como cristianos, nuestro punto de vista sobre lo que es la riqueza debe estar gobernado por una perspectiva divina. En esta lección vamos a ver el tema del propósito de riqueza y si Dios quiere que la tengamos.
Todo tiene su validez basado en su propósito
Recuerdo haber escuchado una enseñanza de Myles Munroe acerca del propósito (él es autor de un libro muy bueno titulado En Busca del Propósito que me gustaría recomendar) en el que hablaba sobre el propósito de las cosas.
Dijo que cuando no se conoce el propósito de algún objeto, existe una tendencia a hacer un mal uso y abuso de ese objeto. El punto que él compartió es muy cierto. Cuando no se conoce el propósito de una cosa, es muy probable que no vaya a ser utilizada en el propósito para el cual su creador la hizo.
Por ejemplo, muchos de nosotros hemos pasado por una situación en la que necesitábamos sacar un tornillo y no teníamos un destornillador. Como no teníamos un destornillador, utilizamos un cuchillo. Si bien esto sirvió para sacar el tornillo, en el proceso dañamos el tornillo y el cuchillo.
Muchos de nosotros hemos necesitado un martillo en algún momento y no teníamos uno a la mano, así que, en reemplazo hemos usado una piedra o algún otro objeto pesado para clavar un clavo. El resultado fue que hemos dañado el clavo y el objeto porque lo hemos usado para un propósito diferente al que se creó.
Lo mismo sucede cuando se trata de la riqueza. La riqueza tiene un propósito divino y solo puede comprenderse a través de ese propósito divino. Si la usamos para cualquier otro propósito diferente del que fue creado, corremos el riesgo de usarlo incorrectamente y dañar la herramienta.
Versículos acerca de la riqueza
Ya que el dinero y la riqueza son temas que están presentes constantemente en la Biblia, me gustaría examinar algunas Escrituras.
• Deuteronomio 8:18 – “Sino acuérdate de JEHOVA tu Dios, porque él te da el poder para hacer las riquezas, a fin de confirmar su pacto que juró a tus padres, como en este día”. Si leemos este pasaje podemos ver que el plan de Dios para el cristiano no es necesariamente darle riqueza, sino la habilidad de hacer riqueza. Una vez que una persona tiene la habilidad de hacer riqueza, su riqueza le puede ser quitada y él la recuperará porque tiene la habilidad de hacer riqueza.
• Eclesiastés 7:12 - “Porque escudo es la ciencia, y escudo es el dinero; mas la sabiduría excede, en que da vida a sus poseedores”. Este pasaje dice que el dinero es una defensa como lo es la sabiduría. Cuando una persona tiene dinero tiene una barrera entre él y la pobreza. Eso no es posible sin riqueza y sin sabiduría sobre cómo usar el dinero.
• Eclesiastés 10:19 - “… y el dinero sirve para todo”. El dinero no es necesariamente la respuesta a todas las cosas pero es una respuesta. He trabajado en el ministerio por varios años, y puedo decir que las cosas son mucho más fáciles cuando tenemos dinero que cuando no lo tenemos. En ese caso el dinero es una respuesta para hacer la voluntad de Dios.
El dinero no es riqueza
Es importante notar que el dinero no es riqueza, sino que la riqueza es el poder otorgado por Dios para adquirir recursos.
“La riqueza es el poder dado por Dios para adquirir recursos”.
Algunos puntos referentes al tipo de riqueza que Dios desea darnos
A continuación se indican algunos puntos en cuanto a la riqueza que debiéramos tener en mente.
• La riqueza que Dios quiere darnos es la riqueza que puede crear dinero - Dios desea darnos ideas, estrategias, etc. para darnos el poder de hacer riqueza. Nos da un motor económico para continuar produciendo dinero.
• La riqueza que Dios quiere darnos es una riqueza que va mucho más allá de nuestras necesidades personales – Durante años de creer en Dios para financiar proyectos, he llegado a la conclusión de que no es de cristianos estar preocupados de suplir para nuestras propias necesidades. Dios desea que cada uno de Sus hijos comience a buscar más allá de sus necesidades personales, y comience a ver cómo puede ser una bendición para los demás. La riqueza nos habilita para hacer eso.
• La riqueza que Dios quiere darnos es para la expansión de Su reino – No se equivoque, la principal razón por la que Dios quiere que prosperemos es para la expansión del evangelio. Los cristianos con más dinero debieran representar mayores finanzas para la iglesia local, lo que permite que el evangelio sea extendido más efectivamente. Cuando ese divino canal no está en el orden correcto es cuando ocurren los problemas.
• La riqueza que Dios quiere darnos es por medio de una comunión constante con El – Dios desea darnos riqueza no tanto como para que podamos ser financieramente independientes, sino para que seamos dependientes de Él. Por medio de nuestra comunión con Dios aprendemos cómo tener la riqueza. Por medio de nuestra comunión con Él aprendemos cómo invertir esa riqueza. Por medio de la comunión con Él aprendemos cómo usarla para los propósitos de nuestro Padre. La riqueza es un medio para un fin y no un fin en sí. Es para acercarnos más a Dios.
• La riqueza que Dios quiere darnos es una riqueza que no trae pesar – Una de las más grandes características de la riqueza que viene de Dios es que es una riqueza que llega sin tristezas. Existen muchas personas que tienen dinero, pero que también les acompaña la tristeza. Sus vidas podrían ser definidas como tristes. La riqueza que viene de Dios viene sin tristeza, pero con una comprensión de que nuestros caminos están agradando a Dios (1 Timoteo 6:10).
• La riqueza que Dios quiere darnos es para un propósito – A través de mis estudios sobre el tema de tiempo de siembra y de cosecha, he llegado a la conclusión de que lo único para lo que vale sembrar financieramente es para cosechar almas. Eso significa que la perspectiva eterna de riqueza no es necesariamente tener una nueva casa o nuevo carro (tampoco eso es malo) sino avanzar en los propósitos del reino de Dios. Cuando nuestras motivaciones son las mismas que las que tiene la divina agenda del Padre, entonces Él no tiene problema en darnos el poder para hacer riqueza.
Respondiendo la pregunta ¿Quiere Dios que tengamos riqueza?
Desde la perspectiva de lo que ya hemos aprendido, me gustaría responder la pregunta ¿Quiere Dios que tengamos riqueza? La respuesta es sí y no.
• La respuesta es sí, si estamos dispuestos a usarla para los propósitos de Dios. ¿Por qué El no querría que la tuviéramos?
• La respuesta es no si esa riqueza va a hacerle daño. Por supuesto Dios no querría hacer algo que fuera a dañarle o herir su relación con Él.
Como padre estoy dispuesto a darles a mis hijos cualquier cosa que no sea potencialmente dañina para ellos. Si ellos la desean y son lo suficientemente maduros para hacer lo correcto, se las daré. Si ellos la desean y no están listos para recibirla, entonces estoy dispuesto a ayudarles a llegar al punto en que puedan recibirla.
Dios es un mejor Padre que lo que soy yo. Él está dispuesto a darnos lo que le pedimos y deseamos, siempre y cuando tengamos las motivaciones correctas y cumplamos Su agenda eterna.
El principio del tiempo de siembra y de cosecha
Uno de los principios más importantes cuando se trata de sembrar y cosechar es la ley del tiempo de siembra y de cosecha. Básicamente lo que dice es que a fin de sembrar, una persona primeramente debe segar.
Génesis 8:22 “Mientras la tierra permanezca, no cesarán la sementera y la siega, el frío y el calor, el verano y el invierno, y el día y la noche”.
Aunque este principio funciona en el ámbito financiero (una persona da a la iglesia local y Dios le va a bendecir) creo que Cristo tenía un propósito más profundo. Si una persona siembra financieramente en el palpitar del corazón de Dios (almas perdidas) entonces Él le dará más dinero porque fue fiel con lo que tenía.
Mateo 6:19-21 “No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín corrompen, y donde ladrones minan y hurtan. Sino haceos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el orín corrompen, y donde ladrones no minan ni hurtan. Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón”.
Creo que el propósito de la riqueza es dar a conocer el Reino de los Cielos. Cuando una persona tiene esto en su agenda, entonces Dios le dará ideas creativas, estrategias, etc., para crear riqueza. Nuevamente, esta cita bíblica no está diciendo que no vivamos bien en la tierra, sino dice que eso no debiera ser el principal propósito de tu riqueza. Dios no puede bendecir el egoísmo.
¿Cómo podemos planificar nuestra agenda con respecto a la riqueza de acuerdo a la agenda de Dios?
1. Decida qué cantidad de su dinero es una semilla y cuánto de su dinero es alimento. Yo organizo mis finanzas en tres categorías. Para lo que voy a comer (para mis propias necesidades), para lo que se debe reinvertir (para hacer más riqueza) y finalmente para lo que voy a sembrar en el Reino de Dios. Las tres son parte de un concepto saludable de riqueza. Asegúrese de que está cumpliendo estas tres.
2. Encuentre buen terreno para sembrar y comprométase a hacerlo. Así como cualquier agricultor desea tener una cosecha, también debe tener buen terreno para sembrar. El tipo de terreno en que usted siembra financieramente con su semilla es muy importante. Encuentre lugares que ministran a las personas inconversas que están en el latir del corazón de Dios, y comience a sembrar en esas áreas.
3. Honre al Señor con su diezmo. Muchas veces las personas se olvidan de honrar los lugares donde han sido espiritualmente alimentados. Como iglesia creemos que el Señor manda a Sus hijos que sean miembros productivos del cuerpo de la iglesia local y una parte de eso es traer el 10% de sus ingresos a la iglesia local. Haga que el diezmar sea su expresión de honra y amor hacia Dios y a su iglesia local.
4. Estudie las escrituras para ver como puede ser más fiel en el área de siembra y de cosecha. La Biblia está llena de instrucciones acerca del dinero. Deje que las Escrituras sean su maestro sobre cómo honrar a Dios con sus finanzas.
5. Aléjese de las malas deudas lo más que pueda. Finalmente me gustaría sugerirle que se aleje de las malas deudas lo más que pueda. Cuando no tiene el dinero para algo, no tome un atajo enredándose en deudas para conseguirlo más pronto. Si usted le permite a Dios enseñarle y construir su fe hasta que pueda recibirlo, entonces no solamente habrá recibido lo que deseaba, sino que también habrá adquirido la sabiduría para tener la riqueza. Estará en una mejor situación en el futuro.
Conclusión: La riqueza es una herramienta para ayudar a expandir el evangelio de Cristo aquí en la tierra y Dios desea dársela a usted.
--------------------------------------------------------------------------------
SOBRE EL AUTOR - DaRonn y Angie Washington son los fundadores de Ministerio Cristo Nación. Su visión es entrenar y ayudar a la iglesia de Jesucristo a cumplir el llamado de Dios. Para esto, cuenta con un programa para formar escuelas bíblicas y capacitar líderes. Su deseo es crear Ministerios alrededor de América del Sur.