Es necesario estirar tanto nuestro tiempo con las presiones de metas que cumplir, que las oportunidades para construir y mantener relaciones positivas con empleados y compañeros de trabajo están tornandose raras, casi en peligro de extinsión.
Pero, al mirar atrás en nuestra carrera, no son las grandes ventas o proyectos marcantes que recordamos más, sino que más disfrutamos de las relaciones, con frecuencia forjados en el calor de extraordinarias exigencias por performances excepcionales.
Al enfrentar la lucha diaria de nuestro trabajo, haríamos bien al considerar y aplicar el dicho que nos instiga a "parar y sentir el perfume de las rosas" apreciando no solo nuestro trabajo, sino también a las personas que desempeñan un papel importante en nuestra capacitación, para que realicemos lo que se necesita hacer, y bien hecho.
Oí a un amigo empresario hablar sobre Terry, un empleado cuya larga y exitosa carrera en la empresa, de repente entró en riezgo. La performance de èl había declinado drásticamente y su jefe estaba preocupado.
Atribuyendo ese declinio al uso de alcohol o drogas, el ejecutivo se preparó para ordenar que Terry se sometiera al test de drogas, pudiendo ser despedido, a pesar de su buen histórico. Otro ejecutivo que conocía a Terry interfirió: ¿No supo lo que sucedió con Terry? Su esposa recibió el diagnóstico de cáncer en fase terminal y él tiene que cuidarla y cuidar a 2 hijos pequeños. Es todo lo que él puede hacer para para poder trabajar todos los días"
De repente, la situación asumió una luz totalmente diferente y el jefe de Terry supo que era necesario una acción inmediata, pero no despedirlo. Después de conversar con él y obtener más detalles de los desafíos que enfrentaba, él le dió a Terry una licencia remunerada de varios meses, para que pudiese dar todo su tiempo y energía a las urgentes necesidades de su familia.
al luchar con proyectos y presiones diarias es fácil perder la visión de los que es más importante que todo, las personas. El libro de Proverbios sugiere la siguiente perspectiva de equilibrio, al ser confrontados con personas que enfrentan graves dificultades:
· Estar atento a los que pueden estar sufriendo o enfrentando desafíos personales. Muchas personas mantienen privacidad sobre su problemas personales, sin hablar al respecto de ellos con otras personas, especialmente con sus superiores.
Esos problemas pueden reflejarse en la caída de la eficiencia o de la cualidad, resultando en descuidos o tasa creciente de errores en el trabajo. Pueden existir explicaciones razonables para una reducción de productividad.
Así que antes de llegar a conclusiones precipitadas, es importante buscar la "historia por detrás de la historia". Si observamos mudanzas de comportamiento o de desempeño significativas, considere causas subyacentes. "Sé diligente en conocer el estado de tus ovejas, Y mira con cuidado por tus rebaños". (Proverbios 27:23)
· No tener miedo de ejercitar compasión y sensibilidad. Compasión y sensibilidad pueden ser grandes recursos administrativos. Cuando los empleados están en conflicto, hay más en juego que apenas necesidades personales.
Personas claves ejercen impacto sobre el desempeño de los compañeros de trabajo y la producción general de la empresa puede ser afectada. Mostrar compasión y sensibilidad, no solo muestra cuidado y preocupación con la persona, como también el reconocimiento de que toda la organización depende fuertemente de su bien estar personal.
Expresiones de gentileza promueven mejores intereses de la empresa, en último análisis. "Los corderos son para tus vestidos, Y los cabritos para el precio del campo; Y abundancia de leche y las cabras para tu mantenimiento, para mantenimiento de tu casa, Y para sustento de tus criadas". (Proverbios 27: 26-27)
