
LA MUJER, HIJA DE DIOS
En medios eclesiales se ha hablado mucho y diversamente de las mujeres de la Biblia. Diferentes en sus roles, distintos testimonios, que nos hacen ver qué en los acontecimientos bíblicos no hay diferencia de sexo, aunque la Biblia parezca un libro sagrado muy machista.
Oremos para que en todos los países y culturas la mujer sea valorada, estimada y respetada.
Pero sabemos que mujeres y hombres participan de los momentos más significativos de la historia de la salvación. Es en el Nuevo Testamento donde aparece por primera vez en la Historia, y es de parte de Jesús, un reconocimiento a la dignidad de la mujer como persona en el proyecto de Dios.
El Señor las valoró, las acogió, las consideró como discípulas y reconoció sus valores y atributos. Incluso a una de ellas la llamó "hija de Abraham", nombre otorgado entonces exclusivamente a los hombres.
En el Antiguo Testamento la mujer ni siquiera se consideraba en los Censos de población. Sólo existía como esposa sometida a su marido con el único papel de obedecer, procrear hijos y cuidar de la extensa familia. Hoy, aún hay países musulmanes, africanos y otros donde esta condición subsiste.
Pero la pregunta es: ¿Vale la mujer sólo por esos roles? ¡Bien sabemos que no! Y como creación divina, como hija de Dios, ¿Qué valor tiene la mujer ante el Creador? Dice Gálatas 3: 28: " Ya no hay judío ni griego, ni esclavo ni libre, ni varón ni mujer, porque todos vosotros sois uno en Cristo Jesús".
Oremos para que en todos los países y culturas la mujer sea valorada, estimada y respetada en su participación en todas las esferas de la sociedad! Y que caigan los muros de la discriminación.!