Una Mujer de Familia
Examíname, oh Dios, y sondea mi corazón; ponme a prueba y sondea mis pensamientos. Fíjate si voy por mal camino, y guíame por el camino eterno.
Salmos 139:23-24
Todos estamos conectados entre nosotros. Lo que afecta a uno, afecta al conjunto. John Donne dijo: “Ningún hombre es una isla, algo completo en sí mismo; todo hombre es un fragmento del continente, una parte de un conjunto".
No podemos permanecer sentadas viendo cómo la humanidad se destruye a sí misma, y no ofrecer ninguna oportunidad de expandir la luz.
Las mujeres entienden acerca de estar conectadas. Desde temprana edad comenzamos formando relaciones e invirtiendo en conocer a las personas que viven en nuestra vecindad. Continuamos cuando empacamos nuestros pequeños almuerzos y vamos al colegio, y luego nos graduamos de nuestros hogares y familias de origen, solo para continuar enseñándoles a nuestras hijas la importancia del amor y la compasión.
Estamos investidas de nuestra humanidad y sin embargo, somos desafiadas cada día al ver las noticias del mundo y descubrir la enorme incongruencia entre un lugar y otro. La inhumanidad del hombre con el hombre nunca ha sido tan notoria como lo que es hoy a escala global. Como mujeres de valor, somos llamadas a restablecer el balance de todo lo que es bueno y humano en otros.
Podemos comenzar este camino invirtiendo algo de tiempo en nuestras propias oraciones y vidas. Necesitamos entender nuestros pensamientos y cómo impactan a otros. Necesitamos asegurarnos de que no estamos haciendo nada que ofenda a Dios o a sus hijos. Cuando empezamos por ahí, ayudamos a crear una nueva posibilidad de cambio.
Empezamos con nosotras mismas, y luego nos extendemos a nuestras familias, nuestros vecindarios y el mundo. Es esencial que nos esforcemos por lograr un impacto para bien. No podemos permanecer sentadas viendo cómo la humanidad se destruye a sí misma, y no ofrecer ninguna oportunidad de expandir la luz. Somos convocadas por el deber, la responsabilidad y el amor a levantarnos y alcanzar a quienes nos rodean. El mundo necesita el bien que solo tú puedes dar.