Di a la sabiduría: “Tú eres mi hermana”, y a la inteligencia: “Eres de mi sangre”.
Proverbios 7:4
La mayoría de nosotras piensa que nacimos con sentido común, o al menos, eso esperamos. Hacemos cosas que parecen razonables, tratamos a los demás con amabilidad, pensamos positivamente y damos lo mejor de nosotras para hacer posible que algo bueno suceda cada mañana, cuando el sol se asoma una vez más. La verdad es que sí tenemos sentido común la mayor parte del tiempo.
Pero lo que Dios quiere de nosotras, quizás sea algo diferente. Dios quiere que tengamos sentido “no común".
Cuando somos hermanas con sabiduría, miramos más allá de lo que otros puedan considerar razonable. Atravesamos lo ordinario y disfrutamos la brisa fresca de todo lo extraordinario. Levantamos nuestras manos para alcanzar al Dios de nuestras mentes y corazones y abrazar su bondad “fuera de lo común”.
Buscamos todo aquello que él quiere para nosotras, porque es sabio hacerlo. Somos su familia, sus hijas y sus amigas en esta tierra.
Como mujer de gran valor, sueles darle al mundo lo mejor de tu sabiduría, señal del verdadero sentido común. Al hacerlo, da un paso más y camina más allá de lo esperable, dejando que lo inesperado, lo extraordinario, la bondad suprema guíe cada una de tus acciones.
No fuiste pensada para ser común. Fuiste creada para hacer grandes cosas mediante la gracia y el poder de aquel que te ama.
Abraza la sabiduría y deja que el sentido “no común”, el sentido de saber que todo es seguro en las manos de tu Padre, te dé la esperanza que necesitas cada día. Sé un poco majestuosa hoy.
Un pensamiento valioso
El sentido común es genialidad vestida con ropa de trabajo.
Ralph Waldo Emerson
Oración
Padre, ayúdame a ser sabia en lo que verdaderamente importa. Ayúdame a depositar mi confianza en ti con sabiduría, aceptando tu bondad fuera de lo común, tu verdad, tu deseo de que viva bien y segura. Déjame caminar en tu santuario y recoger la sabiduría de los tiempos. Amén.