De la ilusión a la decepción, noviazgos que dejan de ser ¿Con qué tipo de persona debo proyectarme en la vida?
Conocí a un muchacho que vino de otro país latinoamericano a estudiar a mi país. Me hizo muchas promesas y me enamoré de él, con la ilusión de que él era el hombre que Dios había escogido para ser mi esposo.
Pero sucede que hace tres meses decidió regresar a su patria sin mencionar siquiera su deseo
de que nos casáramos. Ni siquiera me ha escrito todo este tiempo. Estoy terriblemente decepcionada. ¿Qué puedo hacer?
Su caso no es único, muchas jóvenes sufren la misma desilusión. Quiero que sepa que Dios, quien la creó y la ama, desea lo mejor para usted. En mi
opinión, un novio que se retira sin dar explicación por su proceder, es un hombre inmaduro que no conoce el valor de la dignidad humana y por lo tanto
no sabe respetar a los demás. Yo creo que fue mas bien una bendición de Dios el que este joven se diera a conocer por su forma de actuar. Ahora usted
puede reconocer que él no es la clase de esposo que usted hubiera querido tener para el resto de su vida.
El sabio Salomón dice en Proverbios capítulo 18:
"El que halla esposa halla el bien y alcanza la bendición de Dios".
Me alegra que haya buscado el consejo de un pastor espiritual. Dios tiene a alguien mejor para usted. El hecho de que este joven no le escribe,
simplemente significa que, o estaba jugando con sus emociones, o sencillamente él reconoció que no estaba preparado para el matrimonio, y no sabiendo cómo retirarse con dignidad, simplemente se esfumó y no desea tener comunicación con usted.
El sabio Salomón también dice en el mismo capítulo 18: "El que quiere amigos ha de mostrarse amigo".
Yo le recomiendo señorita que busque varios amigos, de buena moral, alegres, cristianos. Ponga su atención en cosas constructivas. Tome un curso
de algo que verdaderamente le agrade. Pero ante todo, hágase amigo del amigo más sincero y noble que todos podemos tener: Cristo.
El desea ser su amigo y si usted le pide que venga a morar a su corazón, le va a ayudar a escoger el hombre ideal para ser su esposo. Cristo es un amigo fiel para siempre. El le puede dar la paz que usted ahora está necesitando.
No deje que su mente se concentre obstinadamente en este fracaso. Establezca una visión nueva. Con Cristo en su corazón guiando su vida, usted podrá ver las cosas más claras; encontrará nuevos horizontes que le llevarán a experimentar mucha satisfacción.
Ahora mismo, en oración, pídale a Cristo que venga a morar a su corazón para siempre.