Olla
Término genérico para referirse a una diversidad de vasijas de barro, hierro, latón y oro, utilizadas para preparar los alimentos y servirlos. Durante su peregrinación por el desierto los israelitas se quejaban de haber perdido las ollas de carne que comían en Egipto (Éxodo 16:3). Durante la celebración de la Pascua en los días de Josías, la carne no santificada se cocía en olla (2 Crónicas 35:13).
Los libros poéticos mencionan la olla que hierve (Job 41:20) y utilizan este utensilio en expresivas figuras (Salmos 58:9). Se refieren al mar como una olla a la que Dios hace hervir (Job 41:31); al estrépito de los espinos debajo de la olla (Eclesiastés 7:6), etc. Es dramática la narración del guisado que enfermó a un grupo de discípulos de Eliseo, cuando comieron de la olla que, accidentalmente, uno de ellos envenenó con calabazas silvestres (2 Reyes 4:38–41).
En los profetas también hay numerosas referencias a este utensillo (1 Samuel 2:14; Isaías 65:4; Jeremías 1:13; 52:19; Ezequiel 24:3; Miqueas 3:3; Zacarías 14:21; etc.). Todo indica que, tanto en la antigüedad como en nuestros días, las ollas han sido artículo doméstico muy apreciado.