Era una noche muy agradable. Mirábamos por la ventana del restaurante a la interminable hilera de luces del tránsito festivo de de fin de semana que desfilaba por una autopista californiana.
- ¿Dónde está Mateo? --- preguntó mi esposa Julia.
-Fue al baño con David ---dijo Pablo.
Minutos después mi hijo mayor, David, regresó pero en menor, Mateo, de dos años y medio, no vino con él.
Buscamos en el restaurante. Buscamos en el estacionamiento, Después de buscar en un centro comercial cercano comenzamos a sentir desesperación.
Nuestro mayo temor era que hubiese ido a la autopista o a alguna de las congestionadas calles que rodeaban el restaurante.
Buscaba por la pendiente escarpada a la orilla de la autopista cuando lo encontré.
Estaba sentado en la oscuridad, a sólo pocos metros del veloz desfile de autos y camiones.
---Hola, Mateo ---le dije procurando no revelar el pánico en mi voz.
---Hola. Papi ---dijo él---. El hombre me amarró los pies así que me senté.
--- ¿Qué hombre? ---le pregunte.
---Un buen hombre ---dijo Mateo---. Ves, mis pies están bien amarrados.
No podía ver nada en sus pequeños pies, pero él actuaba como si no los pudiese mover. Y en realidad no los podo mover hasta que me incliné y lo tome en mis brazos. “¡Gracias a Dios por sus ángeles!”, grité en la noche.
Julia y yo no debimos de habernos sorprendido. En nuestra adolescencia, ambos tuvimos experiencias personales con ángeles. Julia se encontraba en Zambia un verano, en un esfuerzo evangelístico realizado por juventud Con una Misión.
Ella tenía diecinueve años, hacia poco que se había convertido, y ésa era su primera misión en el extranjero. Sintiéndose angustiada por algunas circunstancias difíciles, esa noche lloró hasta quedarse dormida.
Despertó en medio de la noche sintiéndose refrescada. El Señor abrió sus ojos par ver un ángel guardián, una hermosa criatura vestida de luz. Sus cabellos eran blancos y rizados, y sus ojos luminosos. La habitación estaba llena de paz.
Yo había tenido una experiencia similar el año anterior.
En 1971, dejé mi país de origen, Nueva Zelanda, para asistir a una escuela de adiestramiento de Juventud Con Una Misión en Lausana, Suiza.
Fue una experiencia que cambió totalmente mi vida. Oradores como Loren Cunningham , El hermano Andrés Y Corrie tan Boom nos inspiraron para que consagráramos nuestra vida a Dios como misioneros.
La experiencia más memorable fue oír realmente a Dios hablar en los pequeños grupos de oraciones. Dios llamó a círculos enteros de oración a diferentes países.
En los días que siguieron al final de las clases, mis compañeros estudiantes partieron en equipos a lugares exóticos como Marruecos, Alemania, España y Afganistán, pero yo no podía recibir dirección clara de Dios.
Tenía diecinueve años, y quería más que nada en la vida ser misionero, preferiblemente en un lugar como Brasil o Nueva Guinea.
Tres días después que terminaron las clases, decidí ir a Alemania por que sabía un poco de alemán, y tenía amigos en el equipo pionero alemán, pero mi espíritu estaba atribulado.
“Querido Dios, muéstrame al país adonde debo ir y te serviré allí el resto de mi vida”, era el clamor de mi corazón mientras oraba durante el día.
A la mañana siguiente desperté con un versículo bíblico firmemente implantado en la mente. Era Ezequiel 3:5. Yo nunca había leído el libro de Ezequiel, de manera que no tenía idea de su contenido. Leí: “Porque no eres enviado a pueblo de hala profunda ni de lenguaje difícil, sino a la casa de Israel.”
Toda esa mañana escuche a Dios. El me habló mediante porciones de la escritura y directamente en mi mente. Para mi sorpresa, me llamó al último lugar que hubiera considerado para el servicio misionero: los Estados Unidos de América.
Estaba tan convencido de esta dirección que hice las maletas y tome los autobuses y trenes locales que iban al oeste a través de Europa hacia los Estados Unidos. Tenía veinticuatro dólares para viajar. Mi joven compañero de viaje, que iba a Inglaterra, tenía apenas un poco más de dinero que yo.
La primera noche paré en una casa de Huéspedes de Darmstadt, Alemania. Me metí en la cama tarde en la noche, pero no podía dormir. Un terrible miedo me invadía el alma. “¿Qué estoy haciendo? He gastado la mitad de mi dinero. Nunca lo lograré. Nadie sabe donde estoy.”
De repente, una persona alta y hermosa estaba de pie junto a mi cama, y la veía claramente a la luz de la luna. “No temas; yo estoy contigo” dijo una voz que me llenó de paz. Entones desapareció. Supe que era un ángel del Señor.
El resto de mi viaje a los Estados Unidos estuvo lleno de fe, alegría y milagros. Ese viaje se convirtió en mi experiencia fundamental para probar a Dios, pero esa es otra historia.
Considere la siguiente lista de realidades acerca de los ángeles.
He incluido referencias para un estudio más profundo.
Mientras lee y medita en las inferencias, deje que estas verdades penetren profundamente en todo su ser. Ahora mismo, mientras lee esto, usted está en la presencia de ángeles.
1) Hay muchos millones de ángeles (Apocalipsis 5:11).
2) Son seres de espíritus inmortales creados por Dios para representar i guardar sus intereses (Salmos 148:5).
3) los ángeles fueron creados algún tiempo antes de la creación de los seres humanos.
(Job 38:7).
4) Los ángeles se pueden manifestar en forma humana, como ocurrió en la historia de Lot y Sodoma, y en otras (Génesis 19; Hechos 10:30).
5) En ocasiones, un ángel se rebela en su plena gloria celestial (Daniel 10:6; Mateo 28:3).
6) Se habla de ellos en el género masculino pero no se casan ni se reproducen (Mateo 22:30; Lucas 20:34-36).
7) diferentes categorías de ángeles representan diferentes funciones y niveles de autoridad, incluyendo tronos, dominios, serafines, querubines, arcángeles y ángeles guardianes (Colosenses 1:16; Judas 9).
8) Los ángeles adoran ante el trono de Dios y le sirven obedientemente
(Salmos 148:2; Hebreos 1:6).
9) Ángeles guardianes son asignados a cada niño en el nacimiento y ministran a esa persona a lo largo de la vida (excepto en el caso en que la persona endurezca su corazón contra Dios y determine hacer el mal) (Mateos 18:10).
10) Los ángeles celebran ante el trono de Dios cada vez que un pecador viene a Dios arrepentido (Lucas 15:10).
11) los ángeles escoltan al paraíso el alma de un creyente en su muerte (Lucas 16:22).
12) Los ángeles registran las acciones buenas y malas de nuestra vida en un libro que se abrirá en el juicio final (Malaquías 3:16; Apocalipsis 20:12).
13) Los ángeles son comisionados para ejecutar el juicio divino sobre personas, ciudades y naciones (Eclesiastés 5:6; Ezequiel 9:1-6;
Salmos 35:4-6; 2 Reyes 19:35; Hechos 12:23).
14) Dios usa a los ángeles para llevar mensajes a la gente
(Zacarías 1:9, 13, 14,19).
15) Los encuentros con los ángeles son generalmente breves y formales, diseñados para realzar nuestra relación con Cristo y no para distraernos de ella (Apocalipsis 22:8,9).
16) La Biblia advierte a la gente en cuanto a no adorar ángeles (Colosenses 2:18; Apocalipsis 19:10).
17) Los ángeles disfrutan ahora de una posición superior a la de los seres humanos, pero finalmente servirán bajo los redimidos en la forma de la esposa de Cristo. La esposa de Cristo está dispuesta al lado de Dios, convirtiéndose en la élite de toda la creación. (Apocalipsis 21:9-14; 2 Timoteo 2:12).
18) Los redimidos juzgarán a los ángeles algún día (1 Corintios 6:3).
19) Los ángeles y los creyentes son aliados en el conflicto para expeler a Satanás de su posición en la atmósfera de la tierra. La oración intercesora incesante atrae más ángeles poderosos para impedir la obra de Satanás Hebreos 1:4; Daniel 10:12-13).
20) La obra de los ángeles es distinta a la del Espíritu Santo. Los ángeles administran los asuntos materiales mientras el Espíritu Santo rebela la mente de Dios. Jesús fue dirigido por el Espíritu, enseñado del Espíritu, y fue lleno con espíritu, pero fue defendido a alimentada por ángeles (Mateo 4:11).
21) Algunos ángeles están asignados a territorios terrenales específicos. La Biblia dice que Israel y sus ciudades están bajo la guardia angelical. En Daniel 12:1, Miguel es representado como el príncipe de Israel.
Dado que Israel es una precursora usada para demostrar la verdad de Dios a toda la tierra, podemos concluir que todas las Naciones y subcultura tienen ángeles guardianes asignados a ellas.
El llamado que Pablo recibió para Macedonia en Hechos 16:9 fue comunicado evidentemente por un ángel operando en ese territorio. Cornelio tuvo una experiencia similar con un ángel en Hechos 10:30.
Libro: La reconquista de tu ciudad.
Editorial: Betania.