Descubre versículos que inspiran serenidad, fortalecen el espíritu y ofrecen paz en medio de las dificultades y desafíos.
SALMO 46:10
«Quédense quietos, reconozcan que yo soy Dios. ¡Yo seré exaltado entre las naciones! ¡Yo seré enaltecido en la tierra!»
SALMO 4:4
Si se enojan, no pequen; en la quietud del descanso nocturno examínense el corazón.
SALMO 89:9
Tú gobiernas sobre el mar embravecido; tú apaciguas sus encrespadas olas.
SALMO 107:28 – 30
En su angustia clamaron al SEÑOR, y él los sacó de su aflicción. Cambió la tempestad en suave brisa: se sosegaron las olas del mar. Ante esa calma se alegraron, y Dios los llevó al puerto anhelado.
SALMO 4:8
En paz me acuesto y me duermo,
porque sólo tú, SEÑOR, me haces vivir confiado.
SALMO 23:1 – 2
El SEÑOR es mi pastor, nada me falta; en verdes pastos me hace descansar. Junto a tranquilas aguas me conduce
1 CORINTIOS 14:33
Dios no es un Dios de desorden sino de paz.
PROVERBIOS 1:33
El que me obedezca vivirá tranquilo, sosegado y sin temor del mal.
1 TESALONICENSES 4:10 – 12
Hermanos, les animamos … a procurar vivir en paz con todos, a ocuparse de sus propias responsabilidades y a trabajar con sus propias manos. Así les he mandado, para que por su modo de vivir se ganen el respeto de los que no son creyentes, y no tengan que depender de nadie.
