Mucha gente se imagina a Dios como un policía cósmico parado en medio de las galaxias y dirigiendo el tránsito.
«¡Oye tú! Te estás divirtiendo mucho, ¿verdad? ¡Pues ya párale!»
«Y tú. Sí, tú, el del video. ¿Qué clasificación tiene? ¿Es para adultos? Conque sí, ¿eh? ¡Pues está decomisado! Dámelo acá».
«¿Y quiénes son esos dos en la esquina que parecen unos gemelos siameses? ¿Cindy y Roberto? Debí imaginármelo. Ya basta, esto se acabó. Por lo menos mientras yo sea el patrullero».
Dios. El aguafiestas cósmico. Lo único que queremos es divertirnos un poco y Él quiere echarlo todo a perder.
Y, por el contrario, nos imaginamos al diablo como un duendecillo al que le encanta la diversión. El comediante Flip Wilson popularizó la frase: «El diablo me obligó a hacerlo», como si el diablo fuera un «gran chico» que solamente nos quiere ayudar a divertirnos.
Esa es una mentira.
Al diablo no le importa si tú te diviertes o no. Él te odia. Lo único que quiere es acabar contigo. Pedro dice que el diablo siempre está buscando «a quién devorar».
En Tierra Santa un guía de turistas le dijo a su grupo: «Probablemente ustedes están acostumbrados a ver a los pastores detrás de los rebaños arreando a las ovejas. Pero en la Palestina las cosas son diferentes, el pastor va al frente del rebaño guiando a las ovejas».
Al diablo no le importa si tú te diviertes o no. Él te odia. Lo único que quiere es acabar contigo. Pedro dice que el diablo siempre está buscando «a quién devorar».
Para sorpresa de los turistas, el primer rebaño de ovejas que vieron pasar no lo guiaba el pastor sino que más bien corría con él. Apenado, el guía le preguntó al pastor: «¿Por qué corres con las ovejas? Yo creía que los pastores orientales guiaban a las ovejas».
«Ah, sí», respondió el hombre, «eso es cierto. El pastor guía a sus ovejas, pero yo no soy el pastor. Yo soy el carnicero».
Satanás es un carnicero. Él no está interesado en proporcionarte placer o felicidad. Sólo está interesado en devorarte.
Jesús puso las cosas en la perspectiva adecuada y expuso este mito cuando dijo: «El ladrón [Satanás] no viene sino para hurtar y matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia» (Juan 10.10).
Al diablo no le importa si tú te diviertes o no, él solamente quiere robar, matar y destruir.
Dios no quiere echarte a perder la diversión. Él quiere que disfrutes de la vida y que la disfrutes plenamente. Dios quiere que tu vida sea plena y que experimentes los placeres eternos de los que habla el salmista: Me mostrarás la senda de la vida; En tu presencia hay plenitud de gozo; delicias a tu diestra para siempre. (Salmo 16.11)
Ejercicio
Desarrolla tu capacidad para enfrentar el mito del aguafiestas con el siguiente ejercicio:
Lee 1 Pedro 5.8. ¿Cómo describe este verso a Satanás? ¿Por qué?
Lee Job 2.1-8. ¿Qué es lo que el diablo quiere para Job? ¿Por qué?
Lee Zacarías 3.1. ¿Qué es lo que Satanás hace por Josué en este versículo?
Lee Apocalipsis 12.10. Este versículo habla de Satanás. ¿Qué es lo que dice que él hace «día y noche»? De lo que leíste en Job y en Zacarías, ¿puedes determinar a quién se refiere cuando dice «nuestros hermanos»? ¿Te incluye esto a ti?