La Pasión del Carácter Decidido | Andy Andrews | #ReflexionesCristianas #ReflexionesdeVida
Puesto que tenemos corazones decididos, estamos en camino hacia un destino que está asegurado. Personas como Michael Jordan, Oprah Winfrey, Albert Einstein, Richard Branson y Tiger Woods son tan extraordinarias porque con corazones decididos han dominado sus vidas en sus propios términos. Con corazones decididos y con alegría infantil aprendemos a desafiar las normas convencionales.
Originando soluciones y moviéndonos hacia lo que queremos, en vez de lo que no queremos, podemos realmente desarrollar un sentimiento de emoción que desencadena acción frente a la crítica y el rechazo. Esto despierta un deseo ardiente y una determinación implacable cuando las posibilidades están en contra de nosotros.
Pobre el hombre cuyo futuro depende de las opiniones y el permiso de otros. recuerda esto: si tienes miedo a la crítica, ¡morirás haciendo nada!
Destilada en una palabra, la idea de un corazón decidido es pasión. La pasión viene del corazón. No tiene nada que ver con la mente. Es más, en tiempos de decisión podrías haber oído que alguien comentara: «Todo el asunto se movió de mi cabeza a mi corazón». Eso es pasión.
- La pasión te ayuda cuando tienes un gran sueño. Engendra convicción y cambia la mediocridad en excelencia en todo lo que hagas.
- La pasión inspira a otras personas a unirse a tu búsqueda. Podrías prenderte fuego y otros vendrían a verte arder.
- La pasión te ayuda a vencer obstáculos insuperables. ¡Te vuelves imparable! Tu vida se convierte en una declaración, en un ejemplo. Otros verán sus futuros en tus ojos.
Juana de Arco solo tenía diecisiete años cuando dirigió los ejércitos de Francia contra los ingleses. Una tarde cuando los ejércitos de Francia se acercaban a la ciudad, vieron a la distancia decenas de miles de soldados que ocupaban las barricadas en cada elevación.
—En este instante —instó Juana de Arco a sus líderes—. Ahora. Ahora mismo. Debemos tomarlos. Ya.
Los líderes de la joven estaban aterrados ante la audacia y la pasión de ella por ganar esta batalla contra guerreros experimentados. Después de todo, Juana era una muchacha campesina que guiaba una turba de hombres franceses.
—Tengo la intención de atacar el centro de la barricada —informó ella.
—Si vas, ningún hombre te seguirá —le advirtieron.
—No miraré hacia atrás —respondió Juana simplemente.
La pasión de esta jovencita cambió la historia. ¿Qué puedes hacer tú con la pasión que arde en tu corazón?