Falsas Doctrinas

Billy Graham escribió: “En toda la Biblia encontramos advertencias contra los falsos profetas y los falsos maestros “que vienen a vosotros con vestidos de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces” (Mateo 7:15).

A veces, a los cristianos les resulta extremadamente difícil discernir a un falso profeta. . Jesús habló de “... falsos profetas, y harán grandes señales y prodigios, de tal manera que engañaran, si fuere posible, aun a los escogidos” (Mateo 24:24).”

El principio básico de todas las tácticas de Satanás es el engaño. El diablo se disfraza con gran habilidad y astucia. Su engaño comenzó en el Jardín del Edén y continua hasta nuestros dias. . . Está en los seminarios teológicos e incluso en los púlpitos. Muchas veces invade también la iglesia bajo el disfraz de un vocabulario ortodoxo, privando los vocablos sagrados de su sentido biblico.

¿Qué es una doctrina falsa?

Cualquier enseñanza que sea contraria a las doctrinas básicas de la Palabra de Dios, tales como la Trinidad, el nacimiento virginal de Cristo, la muerte redentora de Cristo, junto con su resurrección física y su segunda venida, la salvación por gracia por medio de la fe en Jesucristo, la resurrección física de todos los creyentes y la realidad del cielo, la condena eterna para quienes rechazan a Cristo, etc.

Algunos consejos para prevenir la adhesión a una falsa doctrina cristiana:

Estudia la Biblia: Familiarízate con la Palabra de Dios y desarrolla un entendimiento sólido de sus enseñanzas. Esto te permitirá discernir la verdad y reconocer cualquier enseñanza falsa que contradiga las Escrituras.

Oración y comunión con Dios: Mantén una relación personal y constante con Dios a través de la oración y la comunión. Esto fortalecerá tu conexión espiritual y te ayudará a discernir la guía del Espíritu Santo.

Verifica las enseñanzas: Examina detenidamente las enseñanzas y afirmaciones de aquellos que proclaman una doctrina. Compara sus enseñanzas con las enseñanzas bíblicas y evalúa si están en línea con la verdad revelada en la Palabra de Dios.

Conocimiento de la historia y la tradición cristiana: Aprende acerca de la historia de la Iglesia y las enseñanzas ortodoxas que han sido sostenidas y transmitidas a lo largo de los siglos. Esto te proporcionará una base sólida para discernir entre las enseñanzas genuinas y las falsas.

Busca consejo y apoyo: No tengas miedo de buscar la orientación y el consejo de líderes espirituales maduros y confiables. Comparte tus inquietudes con ellos y busca su discernimiento en cuanto a las enseñanzas o movimientos que te generen dudas.

Desarrolla discernimiento espiritual: Cultiva la sensibilidad y el discernimiento espiritual a través de la práctica y el crecimiento en la fe. A medida que creces en tu relación con Dios, serás más capaz de identificar y discernir las falsas enseñanzas.

Permanece atento a las señales de advertencia: Presta atención a las señales de advertencia de una doctrina falsa, como la exaltación excesiva de un líder, el enfoque excesivo en la prosperidad material, la negación de aspectos esenciales de la fe cristiana, la manipulación emocional o cualquier enseñanza que se aparte significativamente de la revelación bíblica.

Vive de acuerdo con la verdad: Vive tu fe cristiana en obediencia a las enseñanzas bíblicas y en comunión con otros creyentes que buscan la verdad. Una vida arraigada en la verdad de Cristo te protegerá de ser influenciado por falsas doctrinas.

Recuerda que la vigilancia, el estudio de la Palabra de Dios y la búsqueda constante de una relación íntima con Él son fundamentales para evitar ser engañado por una falsa doctrina.

Citas bíblicas

“Procura con diligencia presentante a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse, que usa bien la palabra de verdad” (2 Timoteo 2:15).


“Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios; porque muchos falsos profetas han salido por el mundo. En esto conoced el Espíritu de Dios: Todo espíritu que confiesa que Jesucristo ha venido en carne, es de Dios; y todo espíritu que no confiesa que Jesucristo ha venido en carne, no es de Dios; y este es el espíritu del anticristo, el cual vosotros habéis oído que viene, y que ahora ya está en el mundo” (1 Juan 4:1-3).

“Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilezas, según las tradiciones de los hombres, conforme a los rudimentos del mundo, y no según Cristo. Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad” (Colosenses 2:8,9).

“Hay camino que parece derecho al hombre, pero su fin es camino de muerte” (Proverbios 16:25).

“Pero el espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios; por la hipocresía de mentirosos que, teniendo cauterizada la conciencia...” (1 Timoteo 4:1,2).