La Historia de Jonás
JONAS 1:1—4. Entristece pensar cuánto pecado se comete en las grandes ciudades. Su maldad, como la de Nínive, es afrenta franca y directa a Dios.
Jonás debe irse de inmediato a Nínive, y ahí en terreno, clamar contra la maldad de ellos. —Jonás no quiere ir. Probablemente haya unos cuantos entre nosotros que no hubiesen tratado de declinar tal misión.
La providencia parece darle una oportunidad para escapar; nosotros podemos salirnos del camino del deber y hasta encontrar viento a favor.
El camino fácil no siempre es el camino recto. Véase lo que son los mejores hombres cuando Dios los deja librados a sí mismos; y la necesidad que tenemos, cuando nos llega la palabra del Sen?or, de tener al Espíritu del Sen?or para que lleve cautivo cada pensamiento nuestro a la obediencia a Cristo.