Lleno del Espíritu
Y los discípulos estaban llenos de gozo y del Espíritu Santo. HECHOS 13.52
Muchos cristianos que conocen y aman al Señor Jesucristo no viven de manera consecuente según los principios de Cristo. ¿Por qué? Debido a que no están llenos del Espíritu.
Vemos lo que esto significa en Efesios 5.18–21. Pablo dice: «Andad en el Espíritu». En otras palabras, deje que el Espíritu de Dios le controle y dirija cada paso. Una cosa es ser creyente y por lo tanto, tener el Espíritu de Dios.
Y otra cosa es ser poseídos por Él, para que Él controle todos los aspectos de nuestro andar. Como dijo Pablo en Gálatas 5.25: «Si vivimos por el Espíritu, andemos también por el Espíritu».
En Efesios 5, Pablo hizo un paralelo negativo entre ser lleno del Espíritu y ser lleno de vino. «No os embriaguéis con vino, en lo cual hay disolución; antes bien sed llenos del Espíritu» (v. 18).
Pablo no estaba indicando que podemos poseer el Espíritu en diferentes medidas. Nadie tiene el Espíritu de Dios en medidas parciales. Pero ser «llenos del Espíritu» significa ser controlado por el Espíritu».
Ser lleno del Espíritu es simplemente ser controlado por Él, para que su poder le domine de una manera positiva. En otras palabras, el Espíritu de Dios es el que nos da poder para vivir una vida de obediencia a Dios.
De hecho, Él es la única fuente de energía que nos permite estar sujetos a la ley de Dios. Sin su poder, no podemos ni siquiera comenzar a agradar a Dios o realmente a obedecerle con motivos puros o con un corazón sincero.