Las reflexiones sobre el amor exploran la nececidad de amar y ser amados. El amor como el poder de transformación más grande que le da sentido a la vida.
Todos hemos oído y visto la publicidad de una bebida que se hace llamar la chispa de la vida. Es un truco publicitario que da cuenta de la profunda necesidad humana de encontrar aquel fuego o pasión que nos haga sentir la vida como algo muy especial.
Los vientos de adversidad soplan fuertemente en todas las direcciones. Eventualmente todos sentimos el peso de alguna prueba, problema, desgracia o revés; tu situación actual no es lo que habías anticipado ni planeado. ¿Por qué sucedió? ¿A quién culpar?
Hay una palabra que parece resumir la esencia del universo, del alma humana, de la vida misma y... del corazón de Dios. Esa palabra breve en todos los idiomas del mundo es: Amor.
Quisiera referirme a una confesión de pecado que ha pasado a la historia como el epílogo de una de las más cautivantes y humanas parábolas que contara a los hombres el incomparable Maestro de galilea.
Seguid el amor; y procurad los dones espirituales, pero sobre todo que profeticéis. Porque el que habla en lenguas no habla a los hombres, sinò a Dios; pues nadie le entiende, aunque por el Espíritu habla misterios.
El más grande mandamiento es el amor ¿Que es el amor? . El amor es aquello que desplaza el egoísmo en la vida. Es lo que llega a sacrificarse por el amado. Es la actitud de comprender la necesidad del otro y meterse en ella.
La paz de Dios puede ser una realidad en nuestra vida en medio de la adversidad. La paz os dejo, mi paz os doy, yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón ni tenga miedo. Juan 14:27.