Pluma: Para escribir sobre materiales blandos, tales como el papiro, algunas pieles, el género y el pergamino, antiguamente se usaba un pincel fino de pelo, el cual se mojaba en → tinta. Posteriormente se usó una caña, preparada con una especie particular de cuchillo (Jeremías 36:18, 23; cf. 3 Juan 13), la cual al principio no tenía una punta dividida. El uso de pluma de aves es desconocido en la Biblia.
Para inscripciones en piedras (Éxodo 24:12; Job 19:24) o en láminas metálicas se usaba a manera de borrador cuando se escribía en tablillas cubiertas de cera (Lucas 1:63; → escritura).